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El Arco Romano de Cabanes es una construcción del siglo II que se ha mantenido en pie hasta nuestros días.

La época romana ha dejado varios restos en las comarcas de La Plana, en Castellón. Uno de ellos es el Arco Romano de Cabanes, que hoy en día se sitúa en una rotonda de la CV-157, en dirección Cabanes-Benlloch.

Este arco se levantó junto al trazado de la antigua Vía Augusta, que era la vía de comunicación principal que pasaba por el litoral español de norte a sur.

Se intuye que el motivo de la construcción fue funerario y de carácter privado, para honrar al propietario de alguna villa que vivía cerca. Se conserva en buen estado y mide 5,8 metros de altura por 6,92 metros de longitud. Aun así, le falta la parte superior y se cree que originalmente medía unos 7-8 metros.

En otras partes de Cabanes se han encontrado sillares del arco romano, que fueron vaciados para ser usados como abrevadero para el ganado. Estar al aire libre y sin protección durante años ha hecho que se roben algunas de sus partes.

Su estructura es de arco triunfal, con líneas simples y proporcionadas. Es más sencillo de lo que debería para su época, alejado de los grandes arcos monumentales, tal vez por la falta de recursos. Si te acercas a verlo, en una de sus pilastras te encontrarás con el escudo de Vilafamés, del que se tiene constancia del del siglo XVIII.

El arco romano de Cabanes es muy importante como testimonio de su época y reflejo de la importancia de la Vía Augusta. Es muy valioso que se haya conservado en parte hasta nuestros días. Visítalo con precaución y admira esta joya de la provincia de Castellón.

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